Telenovela juvenil mexicana producida por Roberto Gómez Fernández para Televisa en el año 2000. Es una nueva versión de la telenovela Dulce desafío. Está protagonizada por Juan Soler y Adriana Nieto, después reemplazada por Irán Castillo, y con las participaciones antagónicas de Laisha Wilkins, Rosa María Bianchi, Juan Peláez, Yula Pozo, Gabriela Platas y Raúl Araiza.
Cuenta también con la actuación estelar de la primera actriz Beatriz Aguirre. Natalia Sandoval es una joven adinerada que sufre mucho por la ausencia de su madre, la cual murió al salvarla de ahogarse en una alberca. Vive con su padre Santiago, con quien mantiene una hostil relación por las constantes discusiones y su desaprobación a la relación que mantiene con Ruth, su novia; con su abuela Esther y su hermana Beatriz. Natalia, así mismo, es la más conflictiva de su internado, el Instituto Minerva, que es dirigido por Clemencia Castañón, una mujer de carácter duro y que hace malos manejos con el dinero del colegio, y que a su vez le hace la vida imposible. En el colegio Natalia cuenta con amigas como Carmen, una joven con problemas de alcoholismo; Lucinda, otra joven que sufre al quedar inválida por un accidente automovilístico y Mirtha, la más humilde y estudiosa de ellas; pero también tiene como enemiga a Rebeca, una joven que le hace la vida de cuadritos. La vida en el colegio es monótona y aburrida y Natalia no cambia su conducta, hasta que llega Enrique Gallardo, un psicólogo escolar del que Natalia se enamorará.