¿Qué pasa con tu cuerpo cuando te desvelas?

A veces los desvelos son inevitables, ya sea por cuestiones laborales, familiares o escolares, es común que terminemos despiertos hasta muy tarde, sin embargo, debes ser consciente de cuán perjudicial es para tu cuerpo. 

Los neurocientíficos de Noruega han estado investigando de cerca las repercusiones potenciales en la salud, y son bastantes. 

Una noche con menos de seis hora de sueño parece inofensivo, pero cuando esto se repite día tras día, tu organismo lo reclama. 

Especialistas del National Sleep Foundation afirman que para que el organismo se regenere, las personas entre 26 y 64 años necesitan dormir entre siete y nueve horas por noche.

Hacer caso omiso de esta advertencia puede valerte las siguientes consecuencias:

1. Aumentas el riesgo de sufrir un evento cerebrovascular

De acuerdo con los investigadores de la Universidad de Birmingham, si duermes menos de seis horas por noche tienes cuatro veces más posibilidades de sufrir un accidente cerebrovascular porque se asocia con aumento en la presión arterial, mayor coagulación de la sangre y arritmia cardíaca.

2. Pérdida de memoria

Probablemente te ha pasado que cuando te desvelas frecuentemente te sientes cansado y sueles olvidar más las cosas. Con el tiempo, esta respuesta se agudiza y tu cerebro se deteriora, causándote daños cognitivos permanentes. Esto porque no das tiempo a que las funciones de almacenamiento de memoria se reactiven, explican científicos de la Universidad de California.

3. Te predispone al Alzhaimer

El sueño acelera la limpieza de las toxinas del cerebro, pero al no completar las horas necesarias, el organismo acumula beta-amiloide, sustancia toxica que predispone al Alzheimer.

4. Matas tu deseo sexual
 
Especialistas del sueño aseguran que tanto los hombres como mujeres privados de sueño tienen el libido más bajo y muestran menos interés por el sexo. Ellos tienen poca energía y regularmente están cansados.
 

5. Tu piel lo refleja
 
La piel, el órgano más grande del cuerpo, manifiesta la falta de sueño con resequedad y un tono “amarillento”, lo que se conoce como piel cetrina. También aparecen ojeras, bolsas, y las líneas de expresión se acentúan.

Lo anterior sucede porque el cuerpo libera demasiado cortisol, hormona del estrés, que en cantidades excesivas puede romper el colágeno de la piel que es el encargado de darle tonicidad y elasticidad.

6. Tu visión se debilita
 
La falta de sueño se asocia con una visión doble, cansada y nublada. Cuanto más tiempo estás despiero, más fallas visuales vas a tener. Los ojos están abiertos, pero la información visual no se procesa normalmente porque se afecta el área frontoparietal del cerebro.

7. Generas sobreproducción de orina
 
Mientras duermes, tu cuerpo disminuye la producción normal de orina, aunque si te privas del sueño provocas la llamada producción de orina nocturna, ligado a la nicturia que es la necesidad de ir al baño muchas veces durante la noche.

8. No respondes a la vacunas 

Cuando no duermes lo suficiente, tu sistema inmunológico no funciona adecuadamente. Un estudio en el que se vacunaron a un grupo de personas contra la hepatitis A, quienes durmieron durante cuatro semanas un promedio de ocho horas diarias, desarrollaron dos veces más anticuerpos contra la hepatitis A que quienes dormían poco.

 
9. Te sientes infeliz

Un estudio dirigido Daniel Kahneman, sicólogo y premio Nobel, concluye que una mala noche de sueño es uno de los dos factores que arruina el estado de ánimo de las mujeres durante el día. Ellas están irritables, fastidiadas y sin motivación, lo que le impide gozar de lo que les rodea.

10. Le das la bienvenida al sobrepeso

Un reciente estudio de Weill Cornell Medical College de Doha en Qatar constata que quienes pierden tan solo 30 minutos de sueño de lunes a viernes son 72% más propensos a desarrollar obesidad comparados con los que duermen ocho horas.

Para evitar todos estos efectos, los expertos aconsejan tener una hora exacta para descansar, misma que debes seguir los fines de semana. La deuda de sueño es un precio muy alto que pagas con tu salud y bienestar emocional.